jueves, 9 de abril de 2009

LIGERO DE EQUIPAJE.

Este año, que se cumplen setenta de la muerte de Antonio Machado, he estado releyendo los últimos capítulos de la biografía que Ian Gibson dedica al poeta: Ligero de equipaje. La vida de Antonio Machado (Punto de Lectura, 2007). El último viaje de Machado es largo: es un peregrinaje que comienza en noviembre de 1936, fecha en la que el poeta huye de Madrid y de la guerra – eso, sí, con su familia: su madre y su hermano José junto con su esposa y sus tres hijas-. Antonio Machado se siente viejo y está enfermo. Pero el poeta no deja de escribir, ahora defendiendo la causa republicana. Primero en Rocafort, Valencia, donde Machado pasa un tiempo relativamente tranquilo, rodeado de limoneros y naranjos, de fuentes y de luz, y recibiendo la visita de intelectuales y amigos que se preocupan por su deteriorada salud. En 1938 debe trasladarse a Barcelona. Es el principio del fin, ya no habrá retorno ni paz. En Barcelona, Machado y su familia viven en La Torre Castañer, un palacete del siglo XVIII en el que el poeta no se siente cómodo. De esta vivienda recordará dos años más tarde su hermano José:”Grandes habitaciones. Salones con profusión de espejos en marcos dorados, piano antiguo, cornucopias, litografías que amarilleaban por el tiempo y grandes y magníficas arañas.[…] continuar


1 comentario:

Begoña dijo...

Noraboa polo voso traballo, deixámosvos un agasallo no Blogfesquío.
Unha aperta.